viernes, 24 de diciembre de 2010

Carta a mis amigos

Fue un año muy difícil. Mucho trabajo, la relaciones familiares, el agotamiento del ministerio en la iglesia… Pero más complicado fue tolerar las presiones de afuera, y esto ha llegado a cansarme en serio. Jesucristo lo dijo: “Viviendo dentro del sistema de este mundo serán afligidos; pero estén tranquilos: Yo he vencido al sistema”. Si la presión existe, al menos algo estoy haciendo bien.

Sí… he decidido andar por el camino menos transitado, y pasar por la puerta angosta, en lugar del camino más transitado, que lleva a la puerta ancha. Y no crean que estoy solo en el mundo: hay muchos como yo, más de los que ustedes creen. Y si han existido presiones, entonces no todo ha salido tan mal.

Así como ustedes dicen hacer lo que quieren, déjenme a mí, por favor, hacer con mi vida lo que desee; sabiendo que yo sí elegí la verdadera libertad, la de hacer lo que quiero y no lo que dictan los demás. Permítanme, si es que puedo, escoger cómo me voy a vestir, con quién me voy a casar, y en general qué actitud tomar frente a la vida. De cualquier manera, como ustedes no le dan cuenta a nadie de sus actos, no se preocupen tanto por mí: yo sí tengo un Juez, un Abogado y un fiscal, y son personas que me parece que ustedes, lamentablemente, no conocen muy bien.

Por ejemplo, si ustedes pueden disponer de su sexualidad a su antojo, ¿por qué no se me permite elegir llegar virgen al matrimonio? Les aseguro que existen muchas chicas en la misma condición, y adivinen a qué tipo de muchachos eligen. Me causa gracia que no lo crean así, porque eso revela parte de su moral ¡Ah! si prefiero no ver ciertas imágenes, o no ir a ciertos lugares o no hacer ciertas actividades, es en pos del mismo objetivo.

No me jacto de nada; si tuviera que calificarme, sería con una “B-” y aprobé el año raspando. Muchas veces me enojé, perdí la paciencia y hasta grité. Pero agradezco a Dios, que Él es especialista en modelar el carácter, y en usar instrumentos como lo fueron ustedes.

Me despido con un abrazo sincero, y deseando de corazón que algún día puedan ver la vida desde este lado, porque han elegido vivir de verdad, la vida eterna, la vida abundante.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Para entender el corazón y la mente de una persona, no te fijes en lo que ha hecho no te fijes en lo que ha logrado sino en lo que aspira a hacer.(Khalil Gibran)

Anónimo dijo...

Que quieres inventar? ahora te la tiras de ingeniero? EN QUE? JAJA